Un periodista fue muerto la semana pasada en un ataque suicida con bombas dentro de la oficina atestada de un partido político en el norte de Sri Lanka, informan el Free Media Movement (Movimiento por Medios Libres, FMM) y otras cuatro organizaciones de medios de comunicación locales.
Rashmi Mohamed, un corresponsal de Sirasa TV, estaba cubriendo la inauguración de la nueva oficina del Partido Nacional Unido en Anuradhapura, en el norte de Sri Lanka, cuando una bomba estalló. Según el Committee to Protect Journalists (Comité por la Protección de los Periodistas, CPJ), 27 personas murieron en la detonación, entre ellos el líder de la oposición del Consejo Provincial Central del Norte, el mayor general Janaka Perera. La Federación Internacional de Periodistas (FIP) informa que Perera fue el blanco del ataque. Casi 80 personas resultaron lesionadas.
"Nuestras organizaciones han expresado una y otra vez nuestro repudio completo al uso de la violencia como una manera de resolver los problemas sociales y políticos. Condenamos este ataque atroz contra civiles desarmados como un crimen contra la humanidad" dijo FMM, junto con la Asociación de Periodistas Profesionales de Sri Lanka (SLWJA), la Federación de Sindicatos de Empleados de los Medios (FMETU), el Foro de Medios Musulmanes de Sri Lanka (SLMMF) y la Alianza de Periodistas Tamiles de Sri Lanka (SLTJA).
Estamos exhortando al Gobierno a que inicie una investigación imparcial y expedita del ataque.
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