En las investigaciones en torno al conflicto político que se vivió en Oaxaca, y en particular en el homicidio del periodista estadounidense Brad Will, la Procuraduría General de la República “mantiene una actuación de carácter parcial” que garantiza la impunidad para el gobernador Ulises Ruiz, coincidieron organizaciones de derechos humanos, reportó La Jornada.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos también ha criticado las investigaciones realizadas y ha denunciado que contienen "deficiencias, irregularidades, omisiones", además de que "no proporcionan una conclusión contundente de cómo ocurrieron los hechos”, señala otra nota de La Jornada.
En tanto, la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) cuestionó las indagatorias de la fiscalía, luego de que se detuviera a dos activistas de esta entidad como presuntos responsables del asesinato, agrega la nota.
Según la investigación oficial, la muerte de Will se habría realizado para “llamar la atención internacional” y presionar a las autoridades mexicanas para que renunciara el gobernador del sureño estado de Oaxaca, Ulises Ruiz.
Sin embargo, diversos grupos populares han responsabilizado a las autoridades por la muerte del camarógrafo de la cadena independiente de Indymedia, ocurrida en octubre de 2006, cuando Will filmaba una serie de violentas protestas para exigir la renuncia del gobernador, añade El Universal.
En una entrevista en Milenio, los padres del periodista cuestionaron la captura del supuesto asesino y calificaron el anuncio de la fiscalía como "un insulto". A su juicio, el gobierno mexicano busca ocultar que “fue su propia gente” la que mató al periodista.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos también ha criticado las investigaciones realizadas y ha denunciado que contienen "deficiencias, irregularidades, omisiones", además de que "no proporcionan una conclusión contundente de cómo ocurrieron los hechos”, señala otra nota de La Jornada.
En tanto, la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) cuestionó las indagatorias de la fiscalía, luego de que se detuviera a dos activistas de esta entidad como presuntos responsables del asesinato, agrega la nota.
Según la investigación oficial, la muerte de Will se habría realizado para “llamar la atención internacional” y presionar a las autoridades mexicanas para que renunciara el gobernador del sureño estado de Oaxaca, Ulises Ruiz.
Sin embargo, diversos grupos populares han responsabilizado a las autoridades por la muerte del camarógrafo de la cadena independiente de Indymedia, ocurrida en octubre de 2006, cuando Will filmaba una serie de violentas protestas para exigir la renuncia del gobernador, añade El Universal.
En una entrevista en Milenio, los padres del periodista cuestionaron la captura del supuesto asesino y calificaron el anuncio de la fiscalía como "un insulto". A su juicio, el gobierno mexicano busca ocultar que “fue su propia gente” la que mató al periodista.
No hay comentarios:
Publicar un comentario