FUENTE: El Instituto Prensa y Sociedad (IPYS), Lima
(IPYS/IFEX) - El 1 de agosto de 2008, el Canal 13 Televisión Universitaria, medio que pertenece a la Universidad San Francisco Xavier de la ciudad de Sucre, al sur del país, suspendió sus transmisiones luego que dirigentes estudiantiles amenazaran con tomar el canal por una supuesta parcialización del medio con un grupo de docentes que reclama el incremento de su salario y realiza un paro indefinido por la negativa de los estudiantes a discutir dicha demanda en el Consejo Universitario.
El 31 de julio, los estudiantes, como advertencia, colocaron una cadena y un candado en la puerta del canal. Los trabajadores desalojaron la sede y suspendieron la señal.
No obstante, el 1 de agosto, por orden del director del canal, RógerGonzález, los empleados rompieron la cadena e ingresaron a trabajar. Pero ante nuevas intimidaciones de los estudiantes, las autoridades universitarias ordenaron cancelar las transmisiones.
Los estudiantes piden la renuncia del director del medio, a quien acusan de propiciar la parcialización de la información. González desmintió ello y denunció las amenazas como un atentado a la libertad de prensa.
Por otra parte, el 3 de agosto, el reportero gráfico Carlos Hugo Vaca, de la agencia de noticias internacional Reuters, fue agredido por un grupo de simpatizantes del partido oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) en lac iudad de Santa Cruz, al este del país.
La agresión ocurrió cuando Vaca cubría una marcha política del MAS promoviendo el Sí a favor del presidente Evo Morales en el referéndum revocatorio que se realizará el 10 de agosto.
El reportero gráfico dijo a la Asociación Nacional de la Prensa (ANP) que una manifestante se le acercó para desinflar las llantas de su motocicleta y así impedir que siga a la caravana.
Luego, cuatro sujetos lo golpearon en los brazos acusándolo de estar a favor de los grupos de poder de Santa Cruz y de los políticos de oposición, que en Bolivia son sindicados por el oficialismo de pretender derrocar a Morales.
El reportero Ricardo Montero, del diario "El Deber", denunció a la ANP que en la misma cobertura periodística, otros reporteros fueron amenazados e insultados por los simpatizantes del mandatario.
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