martes, 9 de diciembre de 2008

Incluso el arte


Por Henri Arturo Linares Rincón.

¿Cómo te pareció la película?
- Buena…uno sufriendo por esa niñita… que boba es sólo una película…
- Tenaz la forma de vida, como viven en esas cuevas y a pesar de eso, la limpieza de todo. - Viste cuando la niña sirvió el agua para el hermanito, era clara, todo estaba pulcro.
Bajamos las escaleras, es un teatro viejo con olor a baúl de abuela. A fotos en blanco y negro.
¡Que frío hace!
Me abrocho la chaqueta, el viento me hace doler la cara.
¿Vas a tomar un taxi?
- Sí, estoy cansada y quiero ver a mi hijo ¿y tú?
No sé, creo que caminare un rato.
- Hummm... ¿con este clima?
Estira la mano y para un taxi, le abro la puerta y ella sube.
- Ten cuidado, no camines mucho.
Te tomas la pastilla y descansa…
- Bueno, un beso, chao.
El frío atraviesa el jean, lo siento en la extensión de mis piernas, camino lento no tengo ninguna prisa, pensar en llegar a mi casa se me hace cansado, triste.
Subo por la calle 72, los lugares de comidas están cerrando, los empleados con caras de sueño barren los andenes de un día de trabajo largo y frío.
Atravieso La carrera 7 y camino hacia el norte. Ha llovido, las calles están mojadas y los carros se mueven más lento que yo. Llego a la calle 75, al atravesarla veo que alguien se esconde en la esquina, por la figura creo que es un policía eso me da más miedo, sigo con desconfianza, paso por el frente, esta equipado como para una guerra, botas, camuflado, boina negra, fusil de asalto, la cara pintada, me mira detrás de esa mascara y sopla sus manos.También lo esta atacando el frío, todo ese equipo no lo defenderá del clima....y se me viene a la mente esa película de soldado universal que hueso.
Qué hace este hombre en medio de la oscuridad y el frío… Sigo caminando y la calle se va iluminado, cada vez encuentro más soldados, camionetas, hombres vestidos con paño y corbatas de colores reunidos hablando y riendo estrepitosamente.
Adelante una construcción llena de luces, carros lujosos, más soldados y mucha agitación... claro; es el club el Nogal, espero no explote mientras voy pasando—
He vencido el clima, mis manos se calientan dentro de la chaqueta, camino con mas decisión, la gente sale de sus trabajos, esperan el bus que los llevara a sus esposas, maridos con olor a alcohol y comidas frías. Me llama la atención un grupo de mujeres y hombres hablando con copas de vino y vasos llenos de whisky, todos se ven perfectos en frente de un local lleno de luz y colores, es una galería de arte, un gran cuadro colgado en la entrada me llama.
- ¿Hacia donde se dirige el señor? me detiene el hombre de la puerta.
¡Quiero mirar!
- Esta prohibido…
¿Esta prohibido mirar en una galería de arte?
Cuando intento sobrepasar al guardia aparece un lord, vestido elegante, corbata oscura.
¿Qué pasa?
¡Que el señor quiere colarse!
Se dirige hacia mí y con una voz muy preparada, dice:
-Es privado, ¡es un cóctel privado!
¿No sabia qué el arte era de unos pocos?
- ¿Es usted artista?
No… Y no quisiera ser propiedad de alguien.
El hombre me mira como quien ve al ser más insignificante del mundo.
¡Retírese por favor!… lo dice en un tono grave, el guardia se me acerca en actitud de pelea…
Lo pienso, me quedo quieto por un segundo esperando no sé que cosa, mi mente da vueltas, no logro entender que pasa, sólo quería echar un vistazo a la obra.
Me retiro y pienso en quien seria el caballero de la entrada… Debió ser el artista.
Detengo un bus, subo, paso los 1200 pesos.
- ¡50 pesos más por favor!
Miro el aviso del valor del transporte, en la noche cuesta más que en el día, debe ser que todo en la noche es más caro….incluso el arte.

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