Tras un intenso cabildeo y organización de campañas por parte del Grupo IFEX de Vigilancia de Túnez (IFEX-TMG), el Observatorio para la Libertad de Prensa, Publicación y Creación (OLPEC) en Túnez y otros miembros de IFEX, el periodista independiente Slim Boukhdhir, conocido por sus puntos de vista francos sobre el presidente tunecino, fue liberado cuatro meses antes del fin de su sentencia.
Boukhdhir, un colaborador de numerosos sitios web tunecinos y árabes, fue liberado el 21 de julio. Dijo a Reporteros sin Fronteras (RSF) que quería agradecer a la comunidad internacional la campaña por su liberación. Apesar de las duras condiciones de la cárcel (higiene deficiente, amenazas de otros prisioneros y despojo de cartas y periódicos independientes) dijo que había "mantenido el optimismo".
"Mi liberación de la cárcel es una victoria para la libertad y el periodismo independiente. El régimen tunecino logró mediante el encarcelamiento privarme del derecho a la libertad de movimiento y de hacer mi trabajo estando entre mis seres queridos. Pero no pudo romper mi voluntad y determinación de seguir adelante con periodismo independiente y ético", dijo Boukhdhir al Committee to Protect Journalists (Comité por laProtección de los Periodistas, CPJ). "Es vergonzoso y degradante para todo el país encarcelar a los periodistas por hacer su trabajo".
Aunque los miembros de IFEX saludaron su liberación, creen que nunca debió haber sido encarcelado. Boukhdhir fue arrestado el pasado noviembre en Sfax, mientras se dirigía a Túnez para una reunión concertada con un policía que manejaba su solicitud de pasaporte. Fue multado y encarcelado por los que se consideran cargos inventados de "conducta injuriosa" hacia un funcionario, infringir la decencia pública y negarse a mostrar sus documentos de identidad.
Sus abogados de la defensa dijeron que la sentencia de un año no sólo era la máxima permitida por la ley, además era inaudita para esos delitos.
Los periodistas independientes y activistas de derechos han visto el tratamiento a Boukhdhir como una venganza por su cobertura a las infracciones a los derechos humanos bajo el presidente Ben Ali. En Túnez los disidentes rara vez son acusados por sus actividades políticas; en lugar de ellos son acusados falsamente de delitos más "deshonrosos" que ayudan a evadir la crítica internacional, dice el OLPEC.
"El juicio de Boukhdhir es uno de esos juicios injustos que el régimen tunecino está acostumbrado a preparar para castigar a los periodistas independientes y activistas de derechos humanos" dice el OLPEC. "Las instituciones estatales como el aparato de seguridad, el sistema dejusticia y los medios se movilizan para hacer creer a la gente que los activistas por la libertad en Túnez son delincuentes del orden común. Debemos poner fin a esta política".
Ésta no fue la primera vez que se atacó a Boukhdhir; protagonizó varias huelgas de hambre en los últimos años para protestar por el acoso gubernamental y la negativa de las autoridades a concederle un pasaporte. Fue atacado en Túnez en mayo de 2007, poco después de escribir una nota en línea que criticaba al hermano de la primera dama.
Según el CPJ, Túnez ha sido el principal encarcelador de periodistas en el mundo árabe durante los últimos siete años. La liberación de Boukhdhir ocurrió cuatro días antes del aniversario 51 de la fundación de la República de Túnez -una fecha en que las autoridades han liberado en otras ocasiones a prisioneros políticos- y apenas una semana antes de la inauguración de una conferencia organizada por el partido gobernante en la que se espera que se de aprobación a Ben Ali para postularse como Presidente por quinta vez en 2009.
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